DEDICADO A TODOS LOS ACTIVISTAS QUE LUCHAN POR UN MUNDO MAS IGUAL. PARA TI CARMEN
No me gusta despegarme de este cotidiano mundo. En parte mi vida se ha parado durante el último mes y en parte he estado más conectado que nunca con mi entorno por temas sociales.
Me gusta leer la prensa, y si es de hace una semana mejor, la distancia y la permanente conexíón que tengo a diario con la realidad me ofrecen una visión muy particular. Tampoco pretendo ser referente para casi nadie pero si me gusta compartir, como bien sabéis, las cosas que veo. Ultimamente tengo la impresión de que todo pasa muy deprisa, las revoluciones, los olvidos, las palabras y hasta los sentimientos.
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Las mujeres, siempre inician lo importante... |
Tenía iniciado un artículo sobre Túnez y su revuelta popular, pero como decía, va todo tan deprisa que ya no tiene sentido particularizar este hecho pues se ha convertido en la espoleta para que otros pueblos y gentes tomen ese camino. Egipto, Argelia, Libano, Yemen, vendrán más, sin duda...
Y es que cuando la base se mueve es como un fenómeno natural, imparable, ya van avisados los países del Golfo, Bolivia, Venezuela, Ecuador, Marruecos, países con dirigentes populistas y dictatoriales, pueblos desigualados y quebrados por cabezas de igual talante.
Y es que no tienen ni idea, su ignorancia gobernante les encamina a ese fin. Pero ojo, nunca hay que despreciar a un ignorante, porque aunque lo sea, tienen seguidores que hacen que su ignorancia triunfe, bien aliñada con amiguismos, favores, corrupción y dialéctica populista de masas son también imparables, pero moméntaneos.
Esta noche salgo a la terraza intentando ver las estrellas, es imposible, la
Niebla ha caído a plomo, es impresionante su densidad, te envuelve, te cala los huesos, te inunda y no puedes escapar. Pues estas revueltas, volviendo al tema, son lo mismo, cuando el sufrimiento, la escasez, el hambre y la desesperación por un trabajo aunque sea indigno, por una salida a tantos años de estudio cae como
Niebla y al tiempo ves pasar coches blindados llenos de políticos baratos, escoltados por barrigas complacientes